El fluido refrigerante o gas refrigerante R-32 es del tipo HFC puro, ( Difluorometano = CH2F2 ) con un índice de Potencial de Calentamiento Atmosférico (PCA/GWP = 675) bajo y muy buena capacidad de refrigeración, lo que lo ha convertido en una buena alternativa ecológica principalmente para nuevos equipos de aire acondicionado y bombas de calor domésticas.

Al tratarse de un refrigerante 100% puro, se puede cargar como gas/vapor o como líquido y además es más fácil de recuperar, reciclar y reutilizar. Al cargarse en equipos especialmente diseñados para éste gas, se logra un COP mayor que otros HFC, porque presenta propiedades termodinámicas muy buenas consiguiendo grandes rendimientos. Se utiliza aproximadamente un 30% menos de refrigerante en cada carga comparado con el refrigerante R-410A, lo cual se traduce en un menor consumo y por tanto, menor gasto en refrigerante. No es un gas refrigerante para “retrofit” (reconversión de equipos que utilizan R-410A) por ser considerado ligeramente inflamable. Por lo tanto nunca debe ser cargado en equipos diseñados para R-410A.

Se recomienda a los técnicos instaladores de éstos equipos usar bomba de vacío y juego de manifold con manómetros que el fabricante los haya certificado que son para trabajar con R-32. Se pueden utilizar las mismas tuberías o mangueras que se utilizaban para equipos con R-410A. Se recomienda siempre contar con un detector de fugas de R-32 para evitar al máximo cualquier riesgo de inflamabilidad. Los envases que contienen el R-32 deben estar plenamente identificados para no confundirse con otro refrigerante. También es recomendable tener una balanza para controlar el peso de refrigerante que se está cargando a un equipo cuando se le hace servicio y es aconsejable tener a la mano un ventilador para dispersar al máximo y pronto las posibles fugas que ocurran.